"La comunicación entre el ciudadano y el Gobierno es imposible y más teniendo en cuenta que a los mismos estímulos reaccionan de forma diferente. Esta situación no es un problema de dimensión. Por ejemplo, una empresa, por más grande que sea, siempre tiene una relación de empatía y comunicación con su cliente inmejorable: las pérdidas y ganancias. Si la empresa no gana dinero o decrece en sus resultados, es que no está entendiendo las necesidades del cliente. Si la empresa aumenta sus beneficios, sabe que va por el buen camino. Esta es la diferencia entre el sistema de información del mercado (bidireccional) y el de la burocracia (unidireccional y de mandato).
Por el contrario, si el Estado no tiene dinero, sube los impuestos y se queda tan ancho. Esto nos lleva a otra característica del Estado: no tiene límite ni mesura."
Jorge Valín, en "El problema de la política es la propia política"